¿POR QUÉ NO NOTAMOS LA VELOCIDAD DE LA TIERRA?

Probablemente te lo hayas preguntado alguna vez. Supuestamente la Tierra se mueve a una velocidad de vértigo, pero nosotros ni nos inmutamos.
La Tierra tiene dos movimientos: rotación y traslación. El primero es el giro que el planeta realiza sobre su propio eje, a unos 1.600 km/h (a esto se debe la forma abombada del planeta). El segundo es el desplazamiento de la Tierra a lo largo de su órbita alrededor del Sol. El movimiento de traslación nos transporta a la increíble velocidad de 107.000 km/h.
El conjunto de los dos movimientos se realiza a una velocidad de 901.000 km/h. ¿Increíble verdad? ¿Por qué ni siquiera la notamos?

Piensa en cuando vas en coche, tren o avión, con las ventanas cerradas y velocidad constante (indispensable). Por muy rápido que vayas, si miras a tus pies o a la persona que tienes al lado y no miras al exterior, parece que estés parado. 
Lo mismo sucede con el movimiento terráqueo, no podemos ver moverse al universo, por lo que tenemos la sensación de estar quietos.
Lo importante es la constancia del movimiento. Cuando un avión acelera, lo notas. Es cuando esa velocidad es constante cuando se nos hace imperceptible.

Compartir

Tweet